jueves, 25 de octubre de 2007

¿Por qué no?



¿Por qué pregunta cosas esta niña?
¿Por qué, si dice que mis letras hablan?
Puede que sea porque un ojo me guiña
si los porqués conversación entablan.

Por lo que sea, los que no somos cultos
pensamos, entre enredos de palabras,
que los porqués a veces son ocultos,
que no se esperan siempre a que les abras.

Cuando a un porqué le sigue una pregunta
a veces la contestación es terca,
se nos queda en la lengua de la punta.

Pero ella es perspicaz, camina cerca,
porque busca tener respuesta adjunta.
El porqué es una más vuelta a la tuerca.



¿Por qué no?
Jeremie Iordanoff

1 comentario:

La Chula dijo...

por lo visto, nos encanta el arte/